Compartiendo

 

 Había que levantarse temprano, el viaje era corto pero querían llegar con tiempo

Un café por el camino y después de dejar colocadas las cuatro ruedas, una vuelta por el pueblo y un par de fotos a la iglesia dónde se iba a celebrar la ceremonia

 

Ex colegiata de Santa María - Roa

Saludos, abrazos,  besos, alegría en los encuentros 

Más guap@s que nunca, con la alegría visible no solo en la sonrisa, sino también en la mirada, hicieron sus promesas de amor y entrega delante de sus familias y amig@s

Algun@s les pudimos dar una sorpresa, al  final de la ceremonia,  cantándoles una de las canciones más emblemáticas para nosotr@s, algo así como nuestro himno de los campamentos   -Canta por mi-

 

Felicitaciones, más besos y abrazos, alegría, mesas compartidas, risas, baile y más recuerdos inevitables, sin olvidarnos del  presente que nos permita intentar seguir construyendo un futuro, aunque el  horizonte no se vea tan claro y despejado

Había que trasladarse de sitio para poder continuar con la fiesta y

se terminaba el día para quienes teníamos que volver

 

Inevitable en esa vuelta volver a recordar, era tanto y tan intenso todo lo que habíamos vivido junt@s!!!;  pero nos dábamos cuenta de que el futuro también seguía siendo importante, aunque las  fuerzas ya no fueran las mismas,  ahora l@s más jóvenes, seguían estando en esa primera línea de lucha, seguían estando en el centro de esos movimientos que parecía que estaban volviendo a despertarse del letargo de muchos años, a algun@s solo nos  quedaba  apoyarlos

 

 

En el silencio de mi casa, hacía un repaso de lo que había sido el día y me sentía felíz  

Yo ya no estaba en esa primera línea ni tan siquiera en la segunda, aunque quisiera, mis fuerzas no me lo permitirían, pero el seguir formando parte de sus vidas, de sus luchas, de sus esperanzas en ser capaces de conseguir un mundo mejor y más justo y sobre todo el ver que no solo lo piensan, sino que lo siguen VIVIENDO, que sus casas siguen acogiendo a personas que les necesitan y que lo siguen haciendo contagiando la alegría que llevan dentro…

hace que no pueda dejar de preguntarme 

 

 ¿Qué más podría pedir?

 

Y hace que una vez más no pueda dejar de decir

 

GRACIAS SEÑOR, POR TANTO COMO ME HAS DADO